Reflexión de Lucas 8:14-15
Soy la semilla
que creció entre espinos;
escucho tu voz
pero todo parece negro y oscuro
Voy, sigo mi camino
y entonces me encuentro
con mis propios miedos,
ésos que derrumban tus sueños
La riqueza y el placer
han crecido hasta vencer
y ser más fuertes que la voz
que me ha de hacer crecer
Sí, es La Palabra de tu voz
que hace noble al corazón,
tan suave y blando
como tierra buena
Quiero ser esa tierra
para guardar en mí lo que has dicho,
los secretos del Reino
que en un principio revelaste sólo a doce
Doce hombres como yo
que fueron elegidos
y que decidieron dejarlo todo
al escuchar la voz de tu llamado
¡Oh Sembrador,
planta en mí tu voz,
crece en mí tu amor!
y que así aves puedan reposar y descansar
Haz de mi corazón
un árbol de fe
que nace al sólo creer
y permanece fiel
al confiar en Ti